martes, 30 de junio de 2009

Metalway I

Pues lo prometido es dejarlo bien jodido, digooo, deuda. Toca resumir aquí mi semana y media de viaje, farra, conciertos y destroce general. Se intentará ser lo más fidedigno posible, a pesar de mi memoria un tanto descalabrada.

Viernes 19:
Me despierta mi madre cinco horas y media más tarde de haberme acostado. A las cinco y media, mitad zombie-mitad dormido me movía por la casa. Un desayuno consistente en un vaso de leche, y abajo a esperar al coche que llegaría a las 6.05. A las seis y media están delante de mi puerta (no cabe sorpresa), con lo que mi madre y casti se ponen a jugar al tetris hasta que milagrosamente todo cabe en el capó del coche, momento en que me monto y ponemos rumbo León. No consigo dormirme de ninguna de las maneras, al contrario que jimy que a las primeras de cambio cae. Tras un par de horas de marcha, más o menos, paramos en un bar de carretera. Inauguro la cuenta alcohólica con una cerveza, mientras el resto más o menos desayunan. Aprovechar para ir al baño y, tras el cigarro de Jimy (¬¬), volvemos al camino. Más horas de carretera, CDs que se van devorando poco a poco, y toca la siguiente parada, forzosa, en Burgos. Misteriosa y desesperantemente a la salida a Zaragoza le da por no aparecer en los carteles. Tras una media hora de dar vueltas, la solución resulta ser bajarnos casti y yo, preguntar, y ver que es hacia Logroño. No pasa nada, salimos por fin de la ciudad y a Logroño se ha dicho. Hasta ahí no más percances. La tercera y última parada la realizamos sobre la una y algo. Se compra pan, chorizo, cervezas, calimocho y alguna otra tontería y nos ponemos a comer en el aparcamiento del Eroski. Tras tomarnos eso con calma por fin decidimos ir a Zaragoza. Una vez en tierras mañas no se acaba la odisea. Si a las 3 entrábamos en la ciudad, a las 3.40 estábamos preguntando cómo ir a Valdespartera (AKA: desierto en el que nos acinaron). A las 4 por fin llegamos, nos encontramos con el quinto miembro del grupo, Javi, y ponemos rumbo a la zona de acampada. Hasta ahí bien. La desesperación llega un poco más tarde. Las piquetas no se clavan, el viento lo vuela todo y nos llena de polvo. Las tiendas se van levantando más mal que bien, dobladas literalmente por el viento, hasta el punto de temer echarnos a dormir de noche y despertar volando. Al final, tras cuatro o cinco horas de arduo trabajo, tenemos tres tiendas montadas (aproximadamente) y que parece que puedan resistir un poco el viento del desierto. Para entonces ya están Vilches y Andrea con nosotros. Así que, a falta de otra cosa, ponemos rumbo a la zona de conciertos. Está tocando Bullet, a los que, tras escuchar un poco, decidimos no prestar gran atención y nos metemos a la zona de las tiendas. Cae la camiseta de Bathory, y esta vez vamos a la zona del concierto. Al poco se termina Bullet y empieza Obús. Como la otra vez que los vi, también en primera fila, no hay nada que tachar del espectáculo. Buen setlist, bien animado. Lo único los aires de homosexual de Fortu, pero se le pueden perdonar. La decepción llegó con Ángeles del infierno. Esperaba algo más de ellos, pero llegaron (pese a que no sea demasiado sorprendente) demasiado americanizados, hasta el punto de conseguir que un par de canciones parecieran rap. De todos modos estuvieron cumplidos. Vamos luego a la tienda, unas cervecitas y hasta el día siguiente.


Sábado 20:
Tras haber mirado el día anterior el cartel, decidimos que a Sabatan le falta una o y le sobra una a para atraernos, así que decidimos pasar de ese primer concierto y, pese a no poder dormir hasta más de las 10 de la mañana por el calor, estuvimos descansando y desayunando un ratejo. Llegamos para el principio de Axxis a la zona de conciertos y, pese a que estuvieran bien (que lo admita yo...), nos marchamos a comer a las pocas canciones. Un cacho de tortilla, un filete y mientras casti y Javi me abandonaban para irse a la tienda un rato, yo decidí coger mi coraje e ir a ver a Samael, para hacer sitio para Sodom. Cuando llegué Axxis ya habían terminado y me enocntré a Skorp en la segunda fila, parecía que no había manera de prosperar. Para Sodom, en previsión de unos pogos que no llegaron (al menos hasta la segunda fila, donde estábamos), puse la mano en la barandilla. El concierto no tuvo tacha (al contrario que sus predecesores Samael, de los que mejor no hablo), y city of god, the saw is the law y otras tantas sonaron como debían. Aproveché el intermedio para ir a estirar las piernas y al baño mientras casti, recién llegado, me guardaba el sitio. Misteriosamente, cuando volví, en vez de haber una mano, había sitio para mí entero, con lo que ya tenía la primera fila. Duff Mcaghan fue el siguiente. El ex-guitarra de los guns fue... indefinible. Sólo diré que casti se fue por no oírle, y que yo lo habría hecho de no ser porque habría perdido mi sitio por ello. Un concierto insulso en el que el público pasó completamente, y con razón. Volvieron para Riot, y bien que hicieron porque, pese a no ser mi estilo, lanzaron al escenario la velocidad que caracteriza su música y, aún con las pintas de sudamericano lleno de oro, el cantante lo hizo bien al igual que el resto del grupo. Después llegó el turno de Europe. Para entonces ya estábamos casti y yo en primera fila, misteriosamente. Decidí dejar mi sitio a uno de los otros dos e irme, aún a riesgo de no poder volver, porque me lloraban los ojos. Media hora estuve hasta poder calmar un poco esto, y entonces, algo antes de que terminaran Europe (demasiado antes para mi gusto), me interné entre la legión de gente que había ido a verlos. Una vez acabó el concierto seguí hacia adelante mientras muchos se retiraban, y logré llegar a quinta fila cuando estaban por comenzar los White anglosaxon protestants (véase W.A.S.P.). El concierto me gustó bastante, y durante el transcurso del mismo estuve buscando la forma de seguir avanzando sin mucho éxito. Al acabar justo por un momento quedó todo parado. Oí delante mío un "no nos quedamos a ver a Blind" y automáticamente cambié mi sitio por el tío que lo había dicho, y conjugando esto con un par de personas que abandonaron la primera fila a continuación logré llegar a segunda fila, al lado de casti, skorp y javi. Poco tiempo tardamos en conseguir un sitio más, y Blind Guardian se lucieron en un buen concierto mientras. El cansancio apareció entonces y casti y javi nos abandonaron. Skorp y yo, abandonados a nuestra suerte en primera fila, resistimos. Children of Bodom para mí fue de lo mejor del festival, pese a las críticas de diego. Luego vinieron Barón Rojo para cerrar la noche, con dos horas y media de concierto, y pese a que parte del repertorio me parecía que sobraba, la presencia de Serpa se agradeció mucho y en términos generales mereció la pena. Luego quedó el volver muerto de frío, cansancio y hambre a la tienda. Una vez allí, coger la sudadera y correr a la gasolinera a por una pizza. Hecha la cena, quedó únicamente volver y dormri hasta el día siguiente.


Sucesivos días serán relatados más tarde.

1 comentario:

Lurilla dijo...

Obús nunca never jamás tienen tacha. Todos sus playlist son brutalísimos. Y se lo curran. Yo los he visto como tropocientas veces y creo que nunca ha sido un concierto igual. Y no me blasfemes sobre Fortu, que muerdo, y mucho.

Y a mí me pasó lo mismo con Ángeles en el Leyendas del año pasado. Pero merece la pena verles sólo por los movimientos gays de Gallardo. Muchos más homosexuales que los de Fortu, dónde va a parar.

Has vuelto :D